Introducción
Olvídate de la lasaña con carne de tu madre (que seguro estaba buenísima, pero no se va a enfadar si pruebas otra cosa). Hoy nos vamos de viaje a Liguria con una receta que huele a verano, a albahaca fresca y a mar: la lasaña genovesa. Esta receta tradicional te demostrará que no hace falta bechamel ni salsa de tomate para lograr un plato cremoso, sabroso y que te haga cerrar los ojos de placer en cada bocado.
¿Los protagonistas? Pesto genovés, patatas y judías verdes finas. Sí, has leído bien. Y no, no es una broma de mal gusto, es una sinfonía mediterránea que te hará replantearte tus creencias lasañiles.
Te traigo su historia, una receta paso a paso y varios trucos para que la prepares sin complicarte la vida pero con un resultado de ovación. ¡Vamos a encender el horno!
Historia breve del plato
La lasaña genovesa no nació en una trattoria de película con manteles a cuadros, sino en las cocinas realesde Liguria, donde el pesto genovés es religión y la albahaca se trata mejor que muchos cuñados en Navidad. A diferencia de las lasañas más famosas con ragú o bechamel, esta joya refleja el alma verde del Mediterráneo: ingredientes frescos, vegetales y con identidad propia.
Surgida como plato de temporada, solía prepararse cuando la albahaca está en su máximo esplendor. fragante, intensa y lista para protagonizar el menú. En Liguria se cocina con lo que hay, y lo que hay suele ser bueno: fagiolini (judías verdes finas), patatas cocidas, pasta fresca y un pesto que hace que todo combine como si siempre hubieran estado destinados a estar juntos. En lugar de bechamel, el pesto lo une todo, creando capas de sabor que evocan mar, sol y tardes sin prisa.
Ingredientes (para 4 personas)
🕒 Tiempo total: 1 h 15 min (preparación 30 min + cocción 45 min)
🌡 Horno: 180°C (calor arriba y abajo)
Para la lasaña:
- 250g de láminas de lasaña (pueden ser frescas o precocidas)
- 200g de judías verdes finas (fagiolini)
- 2 patatas medianas (unos 300g)
- 150g de queso parmesano rallado
- 30g de mantequilla
Para el pesto genovés (o puedes usar uno de calidad):
- 60g de hojas de albahaca fresca (solo las hojas)
- 1 diente de ajo
- 30g de piñones (puedes sustituir por nueces si no tienes)
- 60 g de queso parmesano
- 20g de queso pecorino (opcional)
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
¿Dónde encontrar los ingredientes?
- Pesto genovés: Puedes comprarlo en tiendas italianas, tiendas gourmet o preparar el tuyo en casa (te explico cómo más arriba).
- Fagiolini: Son judías verdes finas. Busca las más delgadas en la frutería o mercado, a veces etiquetadas como «judía francesa» o «bobby».
- Pecorino: Un queso de oveja con sabor intenso. Si no lo encuentras, usa solo parmesano.
Paso a paso
1. Prepara el pesto genovés:
- Lava bien las hojas de albahaca y sécalas.
- Tritura en un mortero (o batidora) el ajo con los piñones y una pizca de sal.
- Añade la albajaca y machaca hasta obtener una pasta.
- Incorpora los quesos rallados y, poco a poco, el aceite de oliva hasta lograr una salsa espesa pero fluida.
2. Cuece las verduras:
- Pela y corta las patatas en rodajas finas (2-3mm).
- Limpia las judías verdes y córtalas en trozos de unos 3-4cm.
- Cuece ambas en agua con sal durante unos 8-10 minutos. Escurre y reserva.
3. Monta la lasaña:
- En una fuente apta para horno, unta un poco de mantequilla en la base.
- Coloca una capa de láminas de lasaña.
- Añade una capa de patatas, una de judías verdes y un par de cucharadas de pesto.
- Espolvorea con queso parmesano.
- Repite las capas hasta agotar los ingredientes, terminando con pasta, pesto y parmesano.
- Distribuye unos trocitos de mantequilla por encima.
4. Hornea:
- Precalienta el horno a 180°C.
- Hornea durante 40-45 minutos, hasta que la superficie esté dorada y burbujeante.
- Deja reposar 10 minutos antes de servir.
Consejos útiles
- 🔪 Corte fino: Las patatas finas se cocinan mejor y se integran con la pasta.
- 🧊 Pesto sin oxidar: Si haces el pesto con antelación, cúbrelo con una capa de aceite y guardalo en la nevera.
- 🧀 Queso recién rallado: Da mejor sabor que el envasado. Usa microplane o rallador fino.
- 🌿 Hazlo con antelación: La lasaña se puede preparar el día anterior y calentar. Gana en sabor.
- ♻ Láminas de lasaña precocidas: No necesitas hervirlas, pero asegúrate de que haya suficiente humedad (el pesto y las verduras ayudan).
Maridaje sugerido
Esta lasaña tiene sabores frescos y vegetales, con el toque intenso del pesto genovés. Lo ideal es acompañarla con:
- 🥂 Vino blanco seco tipo Vermentino o Albariño, que realce la albahaca sin taparla.
- 🍷 ¿Prefieres tinto? Un joven suave, como un Pinot Noir ligero, también puede ir bien.
- 🍋 Para una opción sin alcohol: agua con gas y unas gotas de limón o un té frío de hierbas.
Variaciones posibles
- 🐓 Con pollo: Añade pollo desmenuzado cocido entre las capas para una versión más completa.
- 🥬 Versión vegana: Sustituye los quesos por levadura nutricional y el pesto por una versión sin lácteos.
- 🥛 Con bechamel: Si quieres una textura más cremosa, puedes añadir una bechamel ligera entre capas (aunque no es parte de la receta tradicional)
- 🌽 Sin gluten: Usa láminas de lasaña sin gluten y asegúrate de que el pesto no tenga trazas.
Conclusión
La lasaña genovesa es una de esas recetas que demuestran que lo sencillo puede ser sublime. Con ingredientes de siempre y un toque mediterráneo, transforma cualquier comida en un momento especial. Si buscas una receta tradicional con un giro fresco y vegetal, esta es tu próxima parada culinaria.
¿Te animaste a prepararla?
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